miércoles, 4 de marzo de 2015

Cuando la tortilla da la vuelta

Tengo una amiga que llevaba 3 años en paro...tenemos un grupo de wassap para difundir animales perdidos, que necesitan adopción etc y hay más gente metida. Esta chica cuando le da por criticar a una persona a veces parece no tener fin (y eso que en teoría practica meditaciones y siempre te cuenta que hay que tener empatía, asertividad etc debe ser que para aplicar a los demás no para ella misma) y sinceramente a mi ese rollo de criticar sin fin no me va porque he podido comprobar en mis carnes que un dia esos critiqueos pueden ir para ti también.

Pues resulta que una amiga de ese grupo de wassap le han ascendido en su curro y cuando hablaba de que tenía mucho trabajo, que estaba muy contenta por su ascenso y tal a esta chica de las meditaciones no debía tener suficiente con llamarla "la ministra" por detrás que además le dijo a la cara que era de tener muy poca empatía hablar de su trabajo todos los dias mientras ella estaba en paro (cosa que me parece lamentable que eches en cara a alguien que esté contenta porque le vayan bien las cosas solo porque a ti no te vayan bien, victimismos los justos, gracias)
Hasta que ella consiguió trabajo, y un buen puesto por cierto (aqui no vale con estudiar una carrera porque esta chica no tiene ni el bachillerato mientras que otras como aqui la menda se hace una carrera de 5 años, una especialización y estoy cobrando ni 800 euros al mes sin estar dada de alta y dando gracias)

Pues ooohhhh, en cuanto esta chica consiguió trabajo esta tan happy hablando tooooodo el santo dia de su curro, sus jefes, su vida ajetreada....y al resto que nos jodan (sabe de sobra que yo estoy en una mala racha y ni me ha preguntado por mi curro) Ojo, que tres narices me importa que me pregunten o no pero compruebo estupefata cómo a veces la vida da la vuelta a la tortilla y compruebas que pocas personas se aplican el cuento de lo que predicaban cuando ya no les toca a ellas.
Esa es la moraleja que he aprendido estas semanas...esa y que la pizza me sienta como un tiro y más idiota soy yo por haberla comido...ala, vuelta a la restricción de nuevo....

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